CNE en la mira del fascismo
El autor es periodista.
Alcides Castillo
El guion es copia fiel y exacta del utilizado desde cuando el Comandante Hugo Chávez Frías fue a la relegitimación. Todas las narrativas fueron elaboradas desde el Pentágono y los laboratorios de la CIA. Ni una letra más ni una menos. Solo modifican fecha y nombres de la directiva del Consejo Nacional Electoral (CNE).
Las acusaciones van desde parcializados comprados por el gobierno, expertos en montar fraudes y entrenados en Cuba, China y Rusia.
Fabrican dudas y gritan fraude, no participan en el proceso y se retiran del mismo el día de las elecciones. En esta jornada propagandista participa la llamada «Gran prensa» que editorializa el supuesto fraude; así es el accionar de la mediática que parte de Estados Unidos hacia el mundo y refuerzan con las redes digitales.
Pero la oposición usa el doble discurso. Nada dice cuando es el propio organismo electoral que avala sus triunfos en concejos municipales, legislativos, alcaldías, gobernaciones y en el Poder Legislativo.
Es la misión del imperialismo y el fascismo, nacional e internacional.
Hoy nada ha cambiado. Los golpistas desconocen a los consejeros y solicitan que se haga un nuevo Registro Electoral. Desean una directiva que avale «acta mata voto», un organismo integrado por parcialidades opositoras y un «independiente», como sucedió en la Cuarta República. Es el comienzo de la campaña de desprestigio.
El nuevo CNE fue seleccionado por un Comité de Postulaciones Electorales plural y legitimado en la AN por consenso.
Pero las directrices del imperialismo son claras: Difundir que quieren elecciones libres y transparentes, para abonar el terreno de la duda y gritar fraude el día de los comicios, cuando los resultados les sean adversos.
La campaña mediática golpista está en marcha para intentar desprestigiar el ente comicial.