VEA / Yuleidys Hernández Toledo

Una vez más fue el poder popular, su acción, su «estar pendiente», lo que permitió la captura de los dos hombres vinculados a la organización de extrema derecha Vente Venezuela, que el lunes 25 de marzo pretendieron atentar contra la vida del jefe de Estado, Nicolás Maduro, en la plaza Diego Ibarra. Así se desprende de los detalles dados a conocer un día después por el fiscal general Tarek William Saab.

En rueda de prensa, Saab contó que Jerry Argenis Ostos Perdomo, coordinador nacional de la «microsecta» conocida como Vente Venezuela, fue detenido, luego que a las 11:30 de la mañana, una multitud de personas alteradas, señalaban a un ciudadano que se encontraba en la plaza Diego Ibarra, y que presuntamente portaba un arma de fuego entre su ropa y una pancarta.

Esta alerta permitió que los cuerpos de seguridad abordaran al hombre y le encontraran un arma de fuego calibre 9 mm, marca Pietro Beretta y un cargador 9 mm con capacidad de 15 cargas y contentivo de 12 municiones, describió Saab.

De acuerdo con el Fiscal General, unos minutos después fue localizado Carlos Eduardo Castillo, «a quien se le encontró también un arma de fuego calibre 7.65 mm, marca Walther, un cargador con capacidad de 8 municiones y contentivo de 6 balas».

Saab mostró las fotos donde se encontraban los hombres, y precisó que estaban a 20 metros de la tarima presidencial dispuesta en la plaza Diego Ibarra.

También mostró una fotografía donde se aprecia a Ostos, con la que indicó como la «jefa», María Corina Machado.

Ambos hombres al ser detenidos confirmaron su militancia en Vente Venezuela.

«Durante el interrogatorio, ambos afirmaron ser activistas políticos de la organización Vente Venezuela, que como vemos, vuelve a aparecer vinculada a intentos de generar violencia y agredir la integridad del Presidente de la República», especificó.

Saab comentó que sectores extremistas de la derecha «buscan personas a quienes no les importa acuchillar o matar a alguien. Es algo que se nota en su forma de expresarse.

Más adelante al seguir refiriéndose al caso, reflexionó: «Si usted no tiene nada qué ver con la inscripción qué está realizando en este caso el Presidente de la República», ¿qué hacen dos personas con pistolas?, ¿buscando qué? Obviamente nada bueno, y menos con todo lo que hemos sabido durante los últimos meses».

Dijo que Ostos y Castillo serán presentados ante el respectivo Tribunal de Control del Terrorismo, «por la comisión de asociación; magnicidio en grado de tentativa; instigación al odio y porte ilícito de arma de fuego en lugares prohibidos».

Allanamientos desde anoche

El Fiscal General reiteró que tras las detenciones, desde anoche se realizan diversos allanamientos».

Manifestó que el caso de Ostos y Castillo, se suma a agendas violentas que han sido develadas recientemente y los involucrados procesados desde enero de 2023, entre ellas los cinco planes golpistas que pretendían ejecutar sectores de la derecha entre finales del pasado año y comienzo de este.

En ese sentido se refirió al caso de Emil Brandt Ulloa, exagente de María Corina Machado, quien confesó los planes desestabilizadores que planeaba realizar un sector de Vente Venezuela para generar caos y sangre en el país. Entre los implicados en estos hechos se encuentran Magaly Meda, Henry Alviárez, Antonio Ledezma, Julio Borges, y el general retirado Oswaldo Bracho.

Además Emil Brandt Ulloa también reveló que las actividades y planes desestabilizadores que vinculan a la dirigente de extrema derecha María Corina Machado y su equipo, son financiados con dinero que provienen de organizaciones no gubernamentales (ONG) extranjeras.

Comentó que esta revelación tiene estrecha relación con la conspiración Brazalete Blanco, que consistía en la toma de dos cuarteles militares en Táchira y cuyo objetivo final era asesinar al presidente Maduro.

También se refirió a las capturas de Whillfer José Piña Azuaje y Renzo Estibenz Flores, involucrados en un plan magnicida que planeaban ejecutar el 11 de marzo de este 2024, durante una visita de Maduro al estado Monagas. Para ejecutar sus planes, los dos hombres pretendían tomar el Fuerte Paramaconi, ubicado en Maturín, estado Monagas.

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