VEA / Yuleidys Hernández Toledo

La Federación Venezolana de Fútbol (FVF) informó este miércoles 22 de noviembre, que el avión que trasladará de regreso a Venezuela a la selección nacional tras su partido de eliminatorias ante Perúsigue varado en el Aeropuerto Internacional Jorge Chávez», por falta de combustible, a la espera de autorización para poder surtir.

A través de un comunicado, la FVF exige respeto para la selección, sus jugadores y el cuerpo técnico. Pide además que cesen las «medidas restrictivas en contra de la Vinotinto y de nuestro país».

Rutaca, la aerolínea oficial de la Vinotino, informó en horas de la tarde de este miércoles, que la aeronave en la cual viajan los jugadores de la selección venezolana Vinotinto, «tuvo un retraso considerable en su salida de Lima, Perú, por controles de seguridad de la aviación vigentes en este país, a los cuales ha sido sometida la aeronave, tripulantes y pasajeros», refiere el organismo en su cuenta en la Plataforma Instagram.

«Esta situación incide de manera negativa para que las autoridades de ese país puedan autorizar la salida del vuelo, así como el suministro de combustible que permita el regreso a suelo venezolano».

Agregan además que la situación es violatoria al derecho internacional, «de los derechos humanos de nuestros jugadores y personal que se encuentra en Lima, y menoscaba el libre tránsito».

En un comunicado previo, la FVF condenó las agresiones de la Policía Nacional de Perú contra los jugadores de la Vinotinto, tras el fin del partido en el que la selección nacional empató 1-1 con el combinado de ese país, este martes 21 de noviembre.

Al inicio del texto señalan su rechazo a las agresiones físicas y verbales, los actos de discriminación y xenofobia “sufridos por nuestro equipo y nuestra afición… Nuestra federación no tolerará, ni dentro ni fuera de las fronteras venezolanas, ningún trato vejatorio a nuestros jugadores, miembros del equipo técnico ni seguidores de nuestra selección”.

Venezuela denunció más temprano que «el gobierno de Perú comete una nueva arbitrariedad contra los venezolanos, al impedir que el avión que trae de regreso a la selección Vinotinto recargue combustible para emprender el vuelo». La nota de protesta la elevó el canciller de la República, Yván Gil. A través de su cuenta en la plataforma X, calificó la acción del régimen que preside Dina Boluarte, como «un secuestro vengativo a nuestro equipo, que ha realizado un extraordinario juego el día de ayer«. La Vinotinto empató el martes 21 de noviembre 1-1 con Perú.

El gobierno nacional también exigió a la Federación Internacional de Fútbol (FIFA), a la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) y a la Federación Peruana de Fútbol, «una profunda investigación» de las agresiones que sufrieron los jugadores de la selección Vinotinto por parte de la Policía peruana, tras el partido del martes 21 noviembre, y de los actos xenofóbicos contra la afición tricolor. Así lo expuso el Ministerio del Poder Popular para la Juventud y el Deporte en un comunicado.

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