¡Grosera y visceral! Así evidenció la vicepresidenta de Colombia su racismo y desprecio por los migrantes venezolanos

VEA / Yuleidys Hernández Toledo

La vicepresidenta y canciller de Colombia, Marta Lucía Ramírez, volvió a protagonizar un discurso contra Venezuela, en este caso hacia la migración venezolana, al asegurar que a tierra neogranadina llegaron los venezolanos y venezolanas «menos preparados y pudientes».

«Voy a decir algo con mucha sinceridad, Colombia no se ha beneficiado de esa migración mucho más preparada, mucho mejor formada, quizás mucho más pudiente de la que se han beneficiado otros países. Esa primera etapa de la migración venezolana está en Estados Unidos, en Canadá, en Europa, en España; a nosotros nos han tocado realmente los sectores menos pudientes, menos calificados de esa migración”, manifestó en medio de su intervención en el Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA).

En la reunión donde varios gobiernos de derecha en la región continuaron la campaña contra la migración venezolana, la vicepresidenta dio a entender que a pesar de que los migrantes no le han aportado mucho a Colombia, el régimen del presidente Iván Duque si los acogió y supuestamente los protege.

Ramírez, quien presentó los «avances» de la implementación del Estatuto Temporal de Protección para venezolanos (ETPV), aseguró que «Colombia no tiene la capacidad de seguir asimilando nuevos migrantes ni refugiados provenientes de Venezuela».

En su discurso insistió que supuestamente en Venezuela hay una dictadura. Siguiendo el discurso del régimen de Estados Unidos (EE. UU.), pidió elecciones presidenciales en Venezuela.

«Apoyar el restablecimiento de la democracia. Insitir en que no habrá soluciones a los males muchisímos que está viviendo la región por esta migración, si no hay una elección presidencial libre, ojalá pronta en Venezuela; con acompañamiento de la comunidad internacional de Estados Unidos, Europa, América Latina, que garantice el restablecimiento de todas las autoridades electorales», manifestó de manera injerencista.

Recursos inciertos

En su intervención la vicepresidenta de Colombia se refirió a los recursos que ha recibido Colombia de la comunidad internacional para supuestamente apoyar a la migración venezolana.

«Quiero decirles que Colombia ha tenido mesas de donantes muy importantes, donde varios países han mostrado su disposición a apoyar; pero hasta donde ahora los recursos que efectivamente ha recibido Colombia para el apoyo de los migrantes no alcanza a ser un 20 % del valor registrado en las mesas«, señaló.

Inmediatamente agregó: «Como dijo el presidente Iván Duque ayer en Estrasburgo, esta no son plata que vayan a entrar al Estado colombiano, esta son plata para pagar todos los servicios que ya han recibido los migrantes venezolanos, los servicios de salud, de educación».

Colombia es uno de los países que ha promovido la magnificación de la migración venezolana. Esta acción ha estado acompañada de una campaña de xenofobia contra los venezolanos y venezolanas. Ya para noviembre de 2018, el régimen neogranadino había recibido al menos 32,4 millones de dólares por parte de organismos internacionales, tras su llamado de auxilio económico para atender a los migrantes venezolanos, recuerda el libro Venezuela siempre grande.

En agosto de 2019, el entonces canciller Carlos Holmes Trujillo, admitió que ese año habían recibido 96 millones de dólares de los 315 millones de dólares que habían solicitado a la comunidad internacional por la migración venezolana, citó en esa oportunidad la propia Cancillería neogranadina. El funcionario neogranadino falleció en enero de 2020 víctima del Covid-19.

Venezuela ha visto crecer y echar raíces a más de 6 millones de colombianos y colombianas en el país, y en ningún momento la Revolución Bolivariana ha pedido recursos a otras naciones para atenderlos. El Estado los ha incluido en programas sociales, como por ejemplo las Misiones Barrio Adentro, Gran Misión Vivienda Venezuela y los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP).

Ramírez y su vínculo con narcotraficantes

Marta Lucía Ramírez, actual vicepresidenta de Colombia, protagonizó un escándalo en junio de 2020, cuando salió a la luz pública que su hermano Bernardo fue condenado en 1997 a pagar prisión en Estados Unidos por traficar heroína de Aruba a Miami, y al conocerse que fue ella quien pagó la fianza.

“Cuando tuvo oportunidad de salir libre, la fianza de 150.000 dólares la pagó ella junto con su esposo, Álvaro Rincón, ambos enredados hoy por sus nexos comerciales con el narcotraficante Guillermo León Acevedo Giraldo, alias “Memo Fantasma”, expresaba el trabajo de los periodistas Gonzalo Guillén y Julián Martínez, en los portales digitales Cuarto de Hora y La Nueva Prensa, citó en junio de 2020 Telesur.

En marzo de 2020, ya Marta Lucía Ramírez había estado envuelta en un escándalo, cuando el portal InSight Crime publicó un informe sobre Guillermo León Acevedo, conocido como «Memo Fantasma», señalado de tener nexos con paramilitares y narcotraficantes; mencionaba que la empresa de construcción del esposo de la vicepresidenta colombiana, Álvaro Rincón, en donde ella aparece como accionista, desarrolló en Bogotá un proyecto inmobiliario en un terreno de Acevedo, reflejó el 27 de mayo la agencia española EFE.