Alfredo Carquez Saavedra

[email protected]

El caso inédito del asesinato del presidente haitiano, Jovenel Moise, está plagado de incógnitas aún por resolver. Sin embargo, más allá de lo que al final salga a la luz pública, tras previo filtro de sectores interesados, los hechos hasta ahora conocidos revelan, una vez más, el acelerado proceso de decadencia en el que se encuentra el imperio estadounidense.

Digo lo anterior porque, ¿cómo explicar que en ese terrible suceso participaran actores que de alguna u otra manera hacen vida en territorio supuestamente gobernado por Washington? Un médico acusado de ser uno de los autores intelectuales y financista de la operación armada es ciudadano estadounidense. La empresa contratada para aportar mercenarios tiene su sede nada más y nada menos que en Florida. La mano de obra barata y armada estuvo conformada por exmilitares colombianos y un par de estadounidenses.

El dueño de la empresa CTU Security es un venezolano radicado desde hace años en Miami (Antonio Enmanuel Intriago Valera) quien, para que el lector se haga una idea de sus gustos y amistades, se muestra en fotos muy a gusto con personajes señalados hasta el hastío por sus vínculos con el paramilitarismo y el narcotráfico como Álvaro Uribe e Iván Duque.

Ahora bien, si los servicios de Inteligencia gringos no sabían lo que se estaba preparando en sus narices, el presidente Joseph Robinette Biden Jr debería pedir cabezas o al menos profundas explicaciones. Pero esta es una de tantas hipótesis. Otra posibilidad es que la Casa Blanca estuviera enterada del asunto y lo dejara correr. Eso, si fuese cierto, haría del mandatario citado un ser más tenebroso que su antecesor.

Entonces aquí surge la siguiente pregunta: ¿por qué dejar que muera un aliado? La respuesta quizás la señaló hace casi 200 años el sexto presidente estadounidense, John Quincy Adams: “Estados Unidos no tiene amistades permanentes, sino intereses permanentes”, claro mensaje para personajillos como Luis Almagro y los anteriormente mencionados.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

error: Este contenido está protegido !!