(V y último) Un S.O.S. por el bulevar más popular de Caracas (Calle Unión – Plaza Brión)

VEA / Yonaski Moreno

Los característicos adoquines del bulevar de Sabana Grande se extienden por poco más de kilómetro y medio, desde Plaza Venezuela a Chacaíto. En principio, este espacio era conocido como La Calle Real de Sabana Grande y comunicaba la metrópolis con tierra adentro, abriéndose camino al este, entre los hatos y las haciendas. Con la construcción del sistema Metro de Caracas en 1983, esta calle fue definitivamente peatonalizada, resalta el Catálogo del Patrimonio Cultural Venezolano del Instituto de Patrimonio Cultural.

En julio de 2011, en el marco de la conmemoración del Bicentenario de la Independencia de Venezuela, se vio materializada la rehabilitación integral del bulevar de Sabana Grande y sus zonas aledañas, tras cuatro (4) años de arduo trabajo liderados por Pdvsa. Los trabajos incluyeron la recuperación de aceras y calles, restauración de locales comerciales y la instalación de una serie de esculturas, precisó entonces la Alcaldía de Caracas. Como parte de este proceso, también fue garantizada la reubicación de los vendedores populares en espacios adecuados para su actividad económica. El objetivo era convertir el famoso bulevar en una zona de recreación y esparcimiento familiar.

Aunque por varios años se logró mantener el orden en este espacio, hoy la historia es otra. Gran cantidad de vendedores que limitan la circulación peatonal, música a alto volumen, gritos, basura acumulada en diversos tramos, motos que circulan por medio del bulevar, carros estacionados, entre otros, son algunas las situaciones que ha observado Diario VEA en diversos recorridos realizados por el paseo caraqueño como parte de su seriado Un S.O.S. por el bulevar más popular de Caracas.

El quinto y último tramo tramo visitado comenzó en la plaza Brión de Chacaíto (ubicada al final del bulevar) hasta la calle Unión de Sabana Grande. Tan solo unos pocos pasos son necesarios para constatar el estado de los adoquines. Algunos están sueltos pero se mantienen en su lugar. Otros han sido removidos dejando grandes huecos en el piso.

Otro aspecto resalta en esos primeros pasos. Los gritos de «se compra oro, plata, euros, dólares» son constantes. Vienen de varias personas que, con cartel en mano y ofreciendo una tarjeta a cualquiera que transite cerca de ellos, se han desplegado desde la plaza Brion hasta la avenida 3 Las Delicias. Un par de ellos están dispuestos muy cerca de las sedes de Fundacomunal, la Superintendencia Nacional de Cooperativas (Sunacoop) y Barrio Nuevo Barrio Tricolor.

Con un cartel que indica Solo para clientes está identificado un improvisado estacionamiento para motos frente a la tienda textil Hecho en Comuna. Muy cerca de ahí también está estacionada una camioneta doble cabina de color negro y un carro blanco. También hay un grupo identificado con el cartel MOTOTAXI (así, con todo en mayúsculas), que ofrece sus servicios al grito de «mototaxi a la orden».

Grandes sombrillas coloridas refugian a los comerciantes populares del inclemente sol. Sentados en banquitos plásticos, ofrecen al público múltiples productos. También pueden encontrarse los denominados manteleros. La música acompaña la jornada. Muchos de ellos tienen en su puesto una corneta, en la que escuchan, salsa, reggaetón y vallenato. Desde el mercado conocido como «Techos Rojos» también se escucha variada música.

Fila india para poder caminar

Los vendedores están tan cerca unos de otros que es difícil abrirse camino. Con frecuencia se hace una especie de fila, pues se hace necesario que quien camina delante pase o se haga a un lado para continuar con el recorrido. La Ordenanza de Convivencia Ciudadana, Civismo y Justicia de Paz Comunal, en el artículo 19 enumera las conductas que obstaculizan el libre tránsito peatonal y vehicular, entre las que se encuentran «Aquellas realizadas de manera intencional mediante el uso o disposición de objetos muebles, así como cualquier estructura en las vías de circulación vehicular o peatonal».

Otro de los actos sancionados de acuerdo a la ordenanza es el ejercicio de «actividades económicas, deportivas, culturales, recreacionales, de disfrute o de cualquier otra índole en espacios no aptos o no permisados por las autoridades competentes para la realización de dichas actividades, tales como aceras, avenidas, autopistas, calles, bulevares, parques, plazas, y en general cualquier espacio público en el que representen una limitación indebida para la seguridad y el tránsito vehicular o peatonal».

Farmacias y policías rodeados

Al pasar la avenida 3 Las Delicias, se observa mayor orden en los vendedores. Están separados unos de otros, dejando espacio para el desplazamiento de los transeúntes. Diagonal al Centro de Economía Comunal Manuelita Sáenz, inaugurado en 2012 para organizar a trabajadores y trabajadoras de la economía informal, se despliegan varios tarantines. Algunos de ellos rodean la Farmacia Móvil Guardianes de la Patria, perteneciente al Sistema Unificado de Atención Farmacéutica.

No es la única farmacia en esta condición. Entre las calles Unión y Negrín están dispuestas dos farmacias móviles. Casi recostado del primer camión se encuentra un vendedor de lentes y a su lado una mujer vende camisas. También hay vendedores de relojes, termos, accesorios para teléfonos, medias y ropa interior. A escasos metros, la segunda farmacia móvil está rodeada por diversos tarantines en los que venden postres y golosinas. La música suena a gran volumen, gracias a una corneta que uno de los comerciantes populares ha colocado sobre su mesa. En este trayecto también está el módulo del Cuadrante de Paz número 04 que tampoco escapa del bullicio que se vive en este espacio.

Diagonal a la calle Apamate se encuentra la Estación Policial Parroquia El Recreo. Frente a la sede policial no hay vendedores, pero sí los hay a sus lados.

A pocos pasos, una joven de cabello rizado y baja estatura reproduce en un altavoz un mensaje que señala: «Se ofrece servicio técnico para teléfonos, vidrio templado, forros a buenos precios. Tienda física, pregunte aquí».

Las tiendas establecidas por este trayecto del bulevar también parecen desconocer lo estipulado en la Ordenanza de Convivencia Ciudadana, Civismo y Justicia de Paz Comunal en cuanto a la prohibición de «colocar música con altos niveles de sonido en espacios residenciales, locales comerciales con abertura hacia espacios públicos, en unidades de transporte de pasajeros y pasajeras».

Calzamoda, Technocity, Calzados Queen Power, Sevens, VIP C.A (con varios locales a lo largo del bulevar) y Boggy son algunas de las tiendas que colocan música a muy alto volumen con la intención de llamar la atención de los clientes.

Este último trayecto fue visitado por Diario VEA el viernes 26 de abril. Al llegar a la calle Unión, lugar en el que terminó el recorrido realizado el día anterior, un gran cambio fue registrado. Diagonal a la panadería Granier fue abierto un hueco de grandes proporciones en el piso, acumulando adoquines y tierra en varios montones. Una cinta amarilla con la inscripción «No pase» rodea los escombros. Alrededor de este hueco también han sido estacionadas diversas motos. No hay en el lugar nada que explique de qué se trata o si hay alguna empresa encargada de estos trabajos.